Otros lares/Otras épocas

Tres poemas de Ocean Vuong

Foto John D. y Catherine T. McArthur Foundation 

 

ALGÚN DÍA AMARÉ A OCEAN VUONG

                                                                                                                                              A partir de Frank O’hara / A partir  de Roger Reeves 

Ocean, no tengas miedo.

El final del camino está tan allá

que lo hemos dejado atrás.

No te preocupes. Tu padre es solo tu padre

hasta que uno de ustedes olvide. Así como la columna

no recordará sus alas

sin importar cuántas veces nuestras rodillas

besen el pavimento. Ocean,

¿estás escuchando? La parte más hermosa

de tu cuerpo es donde quiera

que caiga la sombra de tu madre. 

Aquí está la casa con la infancia

tallada a la manera de un único cable rojo.

No te preocupes. Simplemente llámalo horizonte

y nunca lo alcanzarás.

Aquí está el hoy. Salta. Prometo que no es

un bote salvavidas. Aquí está el hombre

cuyos brazos son lo suficientemente amplios como para recoger

tu partida. Y aquí el momento,

justo después de que las luces se apaguen, cuando aún puedes ver

la tenue antorcha entre sus piernas.

Cómo la usas una y otra vez

para encontrar tus propias manos.

Pediste una segunda oportunidad

y te dieron una boca donde vaciarte.

No tengas miedo, el tiroteo

es solo el sonido de la gente

intentando vivir un poco más. Ocean. Ocean,

levántate. La parte más hermosa de tu cuerpo

es hacia donde este se dirige. Y recuerda,

la soledad es aún tiempo compartido

con el mundo. Aquí está

la habitación con todos en ella.

Tus amigos muertos pasando

a través de ti como el viento

a través de un móvil de viento. Aquí está un escritorio

con la pata coja y un ladrillo

para que dure. Sí, aquí está una habitación

tan cálida y cercana a la sangre,

lo juro, despertarás—

y confundirás estas paredes

con piel.

 

DetoNación

Hay un chiste que termina con—¿ah?

Es la bomba diciendo aquí está tu padre.

Aquí está ahora tu padre dentro

de tus pulmones. Mira cuán ligera

es la tierra—después.

Incluso escribir la palabra padre

es esculpir una porción del día

de una página iluminada por bombas.

Hay suficiente luz para ahogarse

pero nunca suficiente para penetrar los huesos

y quedarse. No te quedes aquí, dijo él, mi hijo

roto por los nombres de las flores. No llores

más. Así que corrí hacia la noche.

La noche: mi sombra creciendo

hacia mi padre.

 

TORSO DE AIRE

Supón que cambias tu vida.

Y el cuerpo es más que

una porción de noche––sellado

con moretones. Supón que despiertas

y te das cuenta de que cambiaron tu sombra 

por un lobo negro. El niño, hermoso

y ausente. De modo que llevas el cuchillo hasta la pared

y comienzas a darle. Le das y le das 

hasta que se abre una moneda de luz

y consigues mirar, finalmente,

la felicidad. El ojo

que te mira desde el otro lado––

esperando.


Traducción de Plantígrados

Ocean Vuong. Ciudad Ho Chi Minh, 1988. Poeta, ensayista y novelista estadounidense de origen vietnamita. Es autor de los poemarios Night sky with exit wounds (2016) y Time is a mother (2022), y de la novela On Earth We're Briefly Gorgeous (2019). Ha sido merecedor de numerosos reconocimientos, entre ellos el Premio T.S. Eliot de poesía en el año 2017 por Night sky with exit wounds

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